Ser una familia monoparental tiene muchas ventajas a la hora de viajar junto a nuestro pequeño o pequeña. Aquel padre o madre progenitor con uno o varios hijos a su cargo podrá aprovechar el tiempo libre con los más pequeños de la casa disfrutando de unas vacaciones de ensueño, ya que tendrá mayor posibilidad de disfrutar y vivir importantes momentos junto a sus hijos.
Al igual que no todos viajan en agosto, no todas las familias que viajen deben tener un padre y una madre, y puede tener simplemente uno de los dos progenitores. Lo ideal es acudir a un destino donde tengamos la posibilidad de gozar de un sinfín de actividades pensadas para los niños de la casa. La sociedad es bastante heterogénea, por lo que cada vez es más común encontrar a todo tipo de turistas, desde singles, pasando por la típica familia de cuatro miembros, hasta las mencionadas familias monoparentales.
Muchos son los viajes que encontraremos nuestra disposición, viajes temáticos, viajes responsables, viajes de lo más variopintos. Nunca ha sido fácil poder planificar el viaje de un progenitor solo junto a su hijo, pero en los últimos años han sacado ofertas e interesantes paquetes con numerosas propuestas para el disfrute de mayores y pequeños. Generalmente, el perfil de estos viajeros son padres o madres con una edad superior a los treinta años, y con un nivel económico medio-alto.
En la actualidad se ha convertido en toda una experiencia diseñar y planificar un viaje, y para ello contamos con estupendos asesores que nos indicarán cuales son los mejores viajes en los cuales poder potenciar la convivencia entre hijos y padres. También es perfecto para poder compartir experiencias con padres o madres en la misma situación.
Desde realizar un tranquilo crucero hasta realizar un viaje a la mismísima Laponia finlandesa para visitar la cabaña de Papa Noel, pasando por una vacaciones junto al mar o una escapada a la montaña a gozar del aire fresco. ¡No hay ninguna excusa para no hacer un viaje a solas con nuestro hijo!
